La voz es aquello más parecido al “alma” que podemos encontrar en cada uno de nosotros. La voz nos identifica, es un retrato de quién somos y de cómo nos sentimos, es absolutamente personal e intransferible. Es nuestro DNI sonoro. El acto de hablar y escucharse al mismo tiempo convierte nuestra propia voz en una partitura de la cual somos los intérpretes y los espectadores. Cuando hablamos no solemos escucharnos, no reparamos en cómo sonamos, en aquello que hay de particular y de único en nuestro sonido. ¿Quién suena cuando suena mi voz? ¿Quién habla cuando leo el texto escrito por otra persona? Si me escucho no me reconozco. Cuando me grabo me parece que no soy yo, es como si otra persona distinta a mi hablara con mis palabras. Suena falso, suena raro… ¿Qué hay de auténtico y de extraño en la voz de cada uno? ¿Dónde estoy yo y dónde el extraño que habita en mí?
Voz y lenguaje son, a priori, un binomio indisociable. Parece como si la primera no tuviese sentido sin el segundo. Aprender la lengua es lo que hacemos desde que empezamos a emitir sonidos. Ese lenguaje condiciona nuestro pensamiento, construye nuestra subjetividad y determina la forma en que nos expresamos. El lenguaje ordena nuestra voz, la estandariza porque la somete a una estructura a una sintaxis que, aunque creemos que es natural y está ahí desde siempre, en realidad es fruto de una convención que limita las posibilidades que podemos imaginar al usarla y, además, condiciona la fisonomía de nuestro aparato fonador, limitando y reduciendo sus posibilidades sónicas. Pero la voz es mucho más, la voz es materia emocional, es un fenómeno físico-acústico, una fuerza que está íntimamente conectada al cuerpo y al espacio en el que ocurre.
En “Esta es mi voz” quiero indagar en esta doble función de la voz que actúa: por un lado, como retrato personal y por otro como fuerza física. ¿Qué hay entre las palabras y las cosas, entre yo y el otro? Mi voz. ¿Cómo es mi voz exactamente? ¿Qué es lo que más me gusta de ella? ¿Qué es capaz de comunicar mi voz por sí misma y cuánto hay de sometimiento de mi voz a la lengua q hablo? ¿Es mi voz texto? ¿Si no hay lenguaje/texto para qué sirve mi voz? ¿Cómo se comporta? ¿Qué jerarquía hay entre lo que veo y lo que oigo? ¿Cómo puedo jugar a invertir ese camino para el que me escucha?
Durante el proceso me iré interrogando sobre mi propia voz para construir un autorretrato de cómo es y cómo se comporta. Las respuestas irán construyendo una serie de materiales textuales y sonoros que quieren explorar diferentes posibilidades de lo vocal y lo sonoro: sus límites, la naturaleza inherente al soporte vocal y mis hábitos en particular; y que se construyen usando el mismo material acerca del cual se interrogan: la voz, mi voz…. Yes que no puedo hablar de mi voz sin usarla al mismo tiempo.
El proceso tiene estas dos dimensiones: una dimensión narrativa que se construye desde la escritura y otra performativa que se construye desde la oralidad; y que se irán interpelando constantemente.
Me gusta trabajar sobre la idea de que la voz es como un fantasma, como un espíritu. Es el lugar donde habita toda nuestra metafísica. La voz es un cuerpo inmaterial, es un ser invisible que quiero visibilizar y dar cuerpo. ¿Dónde está mi cuerpo y dónde está mi voz? ¿Hasta a dónde pueden llegar uno y otro juntos y también por separado?
Paula Miralles. Trabajo como creadora y gestora en el campo de las artes escénicas. Desde el año 2002 hasta el año 2015 he trabajado como actriz en numerosos proyectos escénicos. Desde 2006 hasta 2017 trabajo junto al compositor de electro-acústica David Alarcón en varios proyectos centrados en la voz, el sonido, la música y la escena. Desde el año 2015 hasta el año 2017 David Alarcón, Esther Vidal y Pilar Parreño nos inventamos el Ensemble Colectivo Mortero y hacemos varias piezas que mezclan violín, viola, electroacústica y oralidad. Actualmente formo parte de Taller Placer junto a Vicente Arlandis, Miguel Ángel Martínez, Violeta Ros y Aina Vidal. Un espacio en el que proponemos actividades relacionadas con la filosofía, el sonido, la literatura, la política y las artes escénicas. En 2018 estreno mi primera pieza en solitario “LP”. Un trabajo de voz y sonido a partir de un repertorio de canciones pop-rock de los años 90.